La brisa de la mañana
La brisa de la mañana
le pide, al fresno, permiso
para llenar de amarillo
todo, todo, todo el piso.
La brisa de la mañana
le pide, al fresno, sus hojas
y el fresno, poquito a poco,
de sus hojas se despoja.
La brisa de la mañana
llena el aire de amarillo
con las hojitas del fresno,
que bailan con alegría,
que vuelan llenas de brillo.
Douglas Wright