10 de marzo de 2009

Los marcianos




Yo conozco bien a los marcianos.




Lo primero que hay que saber acerca de ellos
es que no planean invadir la Tierra.




Los marcianos son gordos a lunares, como
las pelotas para jugar en la playa...




...y también son flaquitos, con escamas
de color verde-azulado.




En realidad, los marcianos tienen cualquier
forma, y los hay de todos los colores.




Los marcianos son muy diferentes entre sí.
No existen dos marcianos iguales, ni siquiera
cuando son hermanos gemelos.




Los marcianos se diferencian de las marcianas
porque sólo las marcianas tienen
las pestañas largas.




Las marcianas no usan tacones altos.
En vez, se pintan las uñas de los pies
con todos los colores del arco iris.
(¡Y el arco iris marciano tiene cientos
de colores!)




Los marcianos también se pintan la uñas, pero
de un solo color.




Los marcianos y las marcianas cantan bien.
Lo hacen con las cornetitas que tienen
por trompa.




Si un marciano tiene varias cornetitas, puede
cantar a dos y tres voces.




Y también puede conversar con él mismo
cuando está aburrido.




Pero lo que ellos prefieren es improvisar.
Y jamás graban su música. Para los marcianos
cantar es tan natural como respirar. Y no
tiene sentido hacer un disco con la respiración,
¿verdad?




Los marcianos son muy inteligentes, por eso
pasan la mayor parte del día jugando.




Su juego favorito es imaginar cosas y hacer
que se vuelvan realidad. Pueden inventar
una pelota cuadrada o un dado triangular.




También pueden hacer agua seca para llevar
en el bolsillo sin mojarse, y nubes perfumadas
con aroma a fresa.




Cuando un marciano se enoja se pone morado
como un venusino.




Entonces, es casi imposible distinguir a un
marciano enojado de un venusino, salvo porque
los venusinos tienen muy buen humor y nunca
se enojan.




La bebida que más les gusta a los marcianos
es una gaseosa de metal líquido, plateada
y brillante, con sabor a fresa (como el aroma
de las nubes), que ellos beben con sorbetes
especiales para no quemarse los labios.




Y su comida preferida: un sandwich de diez
pisos, sin relleno, que siempre dejan
a medio comer.




A los marcianos les encanta salir a pasear
con sus mascotas: el perro todo cola
de Plutón...




...la pulga patona de Júpiter; o el elefante
enano de Mercurio.




Cada vez que le tomo la foto a un marciano,
el rollo se vela y sólo queda un borrón
de colores...




... o la foto sale nítida, pero el marciano
se esconde detrás de un árbol. Así que
no le tomo más fotos a los marcianos.




Si quiero el retrato de un marciano,
hago un dibujo como éste.




Por último: los marcianos son pacíficos
y amigables (y no planean invadir la Tierra).




Lo sé porque yo conozco bien a los marcianos...




¡Yo también soy un marciano!




4 comentarios:

  1. Leo y observo a cada marciano y me imagino la cara de mis chiquis. Soy fanática de los marcianos... es algo que en mi práctica didáctica - pedagógica siempre esta presente.
    Douglas gracias por aportar humor, creatividad, sonrisas, imaginación, producciones en los nenes. saludos Nancy

    ResponderEliminar
  2. Gracias, Nancy...


    Por los elogios y por compartir estos marcianos con tus chiquis.

    Saludos afectuosos para vos y para ellos.

    Douglas.

    ResponderEliminar
  3. Hola Douglas tengo once y desde chiquita me han gustado mucho los marcianos, de verdad te felicito por tu gran creatividad de verdad que me encanto tu historia... y te quisiera preguntar algo que de verdad me encataria que respondieras: ¿tienes mas libros?

    Paty

    ResponderEliminar
  4. Hola Paty...

    Qué bueno que te gusten los marcianos, y éstos en particular.

    He publicado algunos libros: "¿Qué será, qué será?", de Adivinanzas, con Roberto Sotelo; "Bichonario, Enciclopedia Ilustrada de Bichos", con Eduardo Abel Gimenez; "El Castillo Tenebroso", con Roberto (un libro para jugar) y "El Juego de los Disparates", solito y solo...


    Te mando un cariño.


    Douglas.

    ResponderEliminar