El Señor Gardel
era un gran cantor,
era un gran artista,
era un gran señor.
Cantaba sus tangos
con voz muy potente,
y era el preferido
de toda la gente.
El Señor Don Carlos
era un gran tenor,
sombrero de lado,
sonrisa de actor.
Cantó a Buenos Aires,
a las golondrinas,
a pibas de barrio
y a las parisinas.
El Señor Carlitos
era un señorito,
corbata y pañuelo
con mil lunarcitos.
Él le cantó a todas:
chicas de percal,
rubias platinadas,
mozas de arrabal.
Don Carlos Gardel
era un gran señor,
cantando sus tangos:
¡él era el mejor!
Esta poesia aparecera en El Mangrullito Patagonico Nº 13 con indicaciones del blog de Douglas. Es hermosa !!!!
ResponderEliminarBueno...
ResponderEliminar¡Gracias!
Saludos para El Mangrullito Patagónico.
Bonita poesía. Buscaba una sobre golondrinas para usarla con mi hija ahora que las golondrinas han llegado a Lincolnshire. Tiene alguna dedicada a ellas? Gracias. PaldeLincs
ResponderEliminarPoco y (casi) nada...
EliminarLo único que encontré está aquí:
http://eljardindedouglas.blogspot.com.ar/search?q=golondrina
Este grupito de poesías cortas se llama "Nonsenserías", y hay una referida a las golondrinas.
"A esa hojita de papel,
que está tirada en la esquina,
el viento la hace volar
como una golondrina."
Saludos.
Douglas.
Muchas gracias, también he visto hoy el nuevo poema con una referencia a las golondrinas. Para mí su llegada marca el inicio del buen tiempo. Llegaron esta semana a nuestro garage y se quedarán aquí hasta Septiembre. Me gustaría saber dónde pasan la otra mitad del an-o cuando no están haciendo viajes de largo recorrido.
ResponderEliminarSí...
EliminarJusto tenía en carpeta una que hacía referencia a las golondrinas... (¡qué bueno que la encontraste!).
No sabía que iban a parar a Lincolnshire (siempre me las imaginé volando hacia el norte hasta Capistrano, o algo así).
Saludos!